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¿Deberías voltear tu colchón?

La mayoría de los colchones no se deben voltear. A menos que el fabricante recomiende específicamente lo contrario, no debe voltear el colchón.

La mayoría de los colchones modernos están diseñados para ser de un solo lado, lo que significa que su diseño no es propicio para voltearse. La construcción básica de la mayoría de los colchones modernos es la siguiente:

– En la parte inferior del colchón, una capa de soporte gruesa y relativamente firme, típicamente hecha de espuma densa y/o resortes metálicos, constituye el “núcleo de soporte”. – En el nivel superior del colchón, una o más capas de espuma u otros materiales., que cubren varias densidades y niveles de firmeza, conforman el “sistema de confort” – Encima del colchón está su funda, junto con las espumas u otros materiales cosidos.

Este diseño funciona bien para apoyar al durmiente. El sistema de comodidad relativamente cómodo en la parte superior proporciona un buen contorno y comodidad, mientras que el núcleo de soporte subyacente más denso ayuda a mantener el cuerpo apoyado y la columna vertebral correctamente alineada durante toda la noche.

Sin embargo, si le das la vuelta a este diseño, simplemente no funciona tan bien. El núcleo de soporte generalmente se siente demasiado firme para descansar directamente sobre él, y el núcleo de confort no brinda suficiente soporte para mantener el colchón en su forma adecuada.

Si voltea un colchón que no está diseñado para voltearse, terminará con una cama menos cómoda y con menos apoyo. También hará que el colchón se desgaste más rápido y probablemente provocará molestias y dolores a quienes duermen.

Dicho esto, hay una excepción: algunos colchones están diseñados para ser volteables.

Las camas plegables cuentan con diseños de doble cara. En algunos casos, ofrecen dos niveles distintos de firmeza. Por ejemplo, un colchón volteable completamente de espuma puede tener un lado con una calificación de firmeza de 4 sobre 10 y el otro lado con una calificación de firmeza de 6 sobre 10. Otros colchones plegables tienen un único nivel de firmeza uniforme y se pueden voltear para ayudar a prolongar su vida útil.

¿Deberías rotar tu colchón?

La mayoría de los colchones se pueden girar. En muchos casos, esto ayudará a proteger el colchón de daños prematuros. La rotación ayuda a distribuir el desgaste que se produce al dormir en la misma posición en el colchón todas las noches.

Las áreas de un colchón que están expuestas a mucha presión (normalmente alrededor de las caderas y los hombros) tienden a combarse prematuramente. Si el colchón se rota regularmente, es más capaz de soportar esta presión con el tiempo. A menudo, esto significa que un colchón rotado regularmente durará un poco más que un colchón no rotado, potencialmente por un año o más.

Para saber con qué frecuencia debe rotar su colchón, consulte el manual del propietario. Si no puede encontrar recomendaciones directamente del fabricante, aquí hay algunas pautas generales:

Los colchones de espuma viscoelástica y de látex se deben rotar 1-2 veces al año – Los colchones de resortes internos más nuevos se deben rotar 1-2 veces al año – Los colchones de resortes internos más antiguos se deben rotar 2-5 veces al año

Independientemente de la frecuencia con la que elija rotar su colchón, trate de mantenerlo consistente. La idea detrás de la rotación regular de los colchones es cambiar las áreas donde su cuerpo descansa sobre el colchón, y así distribuir los puntos de presión que pueden estar sujetos a la flacidez. Al rotar en un horario constante, puede minimizar el riesgo de flacidez prematura en áreas específicas.

Tenga en cuenta que algunos colchones no se deben rotar. Esto se aplica principalmente a los colchones con un sistema de confort por zonas. Un diseño dividido en zonas contará con soporte adicional donde más se necesita, junto con una sensación ligeramente más suave en otros lugares. Como estos colchones están diseñados para enfocarse en ciertas áreas del cuerpo con apoyo adicional, rotarlos puede resultar en una sensación menos cómoda y de menos apoyo.

Rotar su colchón regularmente puede ayudar a extender su vida útil. Dicho esto, sigue siendo importante saber cuándo reemplazar el colchón. Incluso con un cuidado y mantenimiento diligentes, la mayoría de los colchones deben reemplazarse cada 6 a 8 años.